Autor: Alfredo Enrione – Director del Centro de Gobierno Corporativo y Sociedad

La paradoja del director digital

En una sala de directorio en Santiago, un grupo de directores acaba de aprobar una inversión de US$50 millones en inteligencia artificial. Ninguno de ellos ha usado ChatGPT. Discuten acalorada y teóricamente sobre sesgos algorítmicos, pero nunca han experimentado uno. Debaten sobre privacidad de datos mientras comparten documentos confidenciales por WhatsApp.

La ironía sería divertida si no fuera peligrosa.

El costo de la inexperiencia

¿Cómo puede un director evaluar efectivamente riesgos y oportunidades de tecnologías que nunca ha experimentado? Es como aprobar la construcción de un puente basándose solo en fotos de otros puentes.

La transformación digital no es un proyecto de TI. Es una revolución en cómo pensamos, trabajamos y creamos valor. Sin experiencia directa, los directores están supervisando esta revolución a ciegas.

La invitación juga y ensuciarse en la arena

Es hora de que los directores se ensucien las manos digitalmente:

  • Experimenten con IA generativa
  • Prueben herramientas de análisis de datos
  • Vivan la experiencia digital del cliente
  • Sientan en carne propia las vulnerabilidades cibernéticas

No para convertirse en expertos, sino para desarrollar intuición y criterio informado.

Más allá del PowerPoint

La comprensión real viene de la experiencia directa:

  • El potencial transformador de la IA se entiende usándola
  • Los riesgos de privacidad se internalizan experimentándolos
  • Las oportunidades digitales se visualizan viviéndolas
  • Los sesgos algorítmicos se comprenden encontrándolos

El nuevo director digital

No necesitamos programadores en el directorio. Necesitamos directores que:

  • Han experimentado las tecnologías que supervisan
  • Entienden visceralmente sus riesgos y oportunidades
  • Pueden distinguir hype de valor real
  • Hacen preguntas informadas por experiencia propia

Para reflexionar

  1. ¿Cuándo fue la última vez que experimentaste personalmente con las tecnologías que supervisa tu directorio?
  2. ¿Tus opiniones sobre IA vienen de experiencia directa o de artículos?
  3. ¿Entiendes realmente los riesgos que apruebas gestionar?
  4. ¿Tu expertise digital es teórico o práctico?