Autor: Alfredo Enrione – Director del Centro de Gobierno Corporativo y Sociedad
Como profesor de gobierno corporativo en una escuela de negocios, he estado siguiendo de cerca una tendencia emergente que los ejecutivos y miembros de directorio latinoamericanos deben conocer: el «policiamiento comercial».
Un artículo innovador de Kathleen Claussen en el Harvard International Law Journal titulado «Trade Policing» revela cómo Estados Unidos y otros países están apuntando cada vez más a empresas individuales, en lugar de gobiernos, en sus acciones de fiscalización comercial. Este cambio tiene profundas implicaciones para el gobierno corporativo, la estrategia y la gestión de riesgos.
Puntos clave para los líderes empresariales latinoamericanos:
- Alcance extraterritorial: Las agencias comerciales de EE.UU. ahora pueden tomar medidas contra empresas que operan completamente fuera de EE.UU., incluso si no exportan al mercado estadounidense. Esto amplía dramáticamente el alcance del escrutinio potencial.
- Nuevas áreas de enfoque: El policiamiento comercial se extiende más allá de los temas comerciales tradicionales a áreas como derechos laborales, protección ambiental y derechos humanos. Tus prácticas ASG ahora están directamente vinculadas al cumplimiento comercial.
- Sanciones severas: El incumplimiento puede resultar en prohibiciones de importación, restricciones de exportación y otras medidas punitivas que pueden interrumpir severamente las operaciones.
- Debido proceso limitado: Muchas de estas acciones de fiscalización carecen de salvaguardias administrativas tradicionales, lo que dificulta impugnar o apelar las decisiones.
- Implicaciones en la cadena de suministro: Ahora eres responsable de las prácticas de tus proveedores y socios comerciales de maneras sin precedentes.
¿Qué significa esto para el gobierno corporativo?
- Supervisión ampliada del directorio: Los directorios deben ampliar su supervisión de riesgos para incluir estos nuevos mecanismos de policiamiento comercial.
- Debida diligencia mejorada: Las empresas deben invertir en procesos más robustos de monitoreo de la cadena de suministro y evaluación de socios.
- Cumplimiento proactivo: Esperar una acción de fiscalización ya no es una opción. Es crucial alinearse proactivamente con los estándares de EE.UU. y otros países.
- Reconsideración estratégica: Algunas empresas pueden necesitar reevaluar su presencia global y la estructura de su cadena de suministro a la luz de estos nuevos riesgos.
- Participación de los stakeholders: Construir relaciones más sólidas con las comunidades locales, trabajadores y ONGs puede ayudar a mitigar riesgos y demostrar esfuerzos de buena fe.
El panorama del comercio global y la responsabilidad corporativa está evolucionando rápidamente. Los líderes empresariales latinoamericanos deben mantenerse informados y adaptar sus prácticas de gobierno en consecuencia. Esta nueva era de policiamiento comercial presenta desafíos y oportunidades para aquellos que estén preparados para navegarla estratégicamente.
Los invito a leer el artículo completo de Claussen para una comprensión más profunda de este tema crítico. ¿Cuáles son sus pensamientos sobre cómo el policiamiento comercial impactará a las empresas latinoamericanas? ¿Cómo se está preparando su empresa para esta nueva realidad?