Autor: Alfredo Enrione – Director del Centro de Gobierno Corporativo y Sociedad
Una directora nueva acaba de presentar una observación perspicaz sobre un punto ciego en la estrategia digital. Silencio. Dos minutos después, un director veterano reformula esencialmente la misma idea. De repente, las cabezas asienten con entusiasmo, el presidente elogia la “brillante contribución” y la idea se registra como acuerdo. La directora intercambia miradas con otra colega, quien confirma silenciosamente que sí, acaba de presenciar el fenómeno más común pero menos discutido en las salas de directorio: la economía invisible de la atención.
En los directorios, como en cualquier sistema social, existe una economía paralela que determina cuyas ideas prosperan, cuyas preocupaciones se abordan y cuyas voces realmente moldean las decisiones. Esta no es una economía de dinero, sino de algo igualmente valioso: la atención colectiva.
Las monedas invisibles del poder
La atención en el directorio se distribuye según un sistema implícito de valoración donde no todas las voces comienzan con el mismo capital. Esta distribución asimétrica responde a factores que van más allá de la calidad intrínseca de las ideas:
- Capital reputacional: El peso de la trayectoria previa y las credenciales externas
- Capital relacional: Las conexiones personales con otros miembros influyentes
- Capital histórico: El tiempo de permanencia en el directorio y las victorias pasadas
- Capital de pertenencia: La alineación percibida con el grupo dominante
Un estudio del Instituto de Gobierno Corporativo de América Latina documentó que en reuniones típicas de directorio, el 70% del tiempo de discusión es dominado por aproximadamente el 30% de los miembros. Más revelador aún: este patrón persiste incluso cuando la composición del directorio cambia, sugiriendo que responde a dinámicas sistémicas, no meramente individuales.
Sesgos cognitivos como perpetuadores
Esta distribución desigual se perpetúa a través de sesgos cognitivos que operan bajo la superficie de la conciencia:
- Efecto halo: Las intervenciones de directores con éxito en un ámbito se perciben automáticamente como valiosas en todos los ámbitos
- Homofilia cognitiva: La tendencia a prestar más atención a ideas expresadas en estilos de comunicación similares al propio
- Sesgo de confirmación colectivo: Mayor receptividad a opiniones que confirman las creencias dominantes del grupo
- Efecto de anclaje jerárquico: La influencia desproporcionada de las primeras opiniones expresadas por figuras de autoridad
En contextos latinoamericanos, donde las estructuras jerárquicas tradicionales y el respeto a la antigüedad tienen particular peso cultural, estos patrones pueden intensificarse, especialmente en empresas familiares o de propiedad concentrada.
Redistribuyendo la atención estratégica
Para directorios que aspiran a aprovechar genuinamente su diversidad cognitiva, algunas prácticas pueden reequilibrar la economía de la atención:
- Implementar rotación en el orden de intervención: Establecer protocolos donde el orden de participación varíe sistemáticamente, evitando que las mismas voces “anclen” siempre la discusión.
- Instituir rondas de reflexión silenciosa: Incorporar momentos donde todos los directores escriban sus perspectivas antes de la discusión verbal, reduciendo el efecto de influencia secuencial.
- Asignar roles de “abogados de perspectivas minoritarias”: Designar rotativamente a directores para que defiendan activamente posiciones subrepresentadas, independientemente de su opinión personal.
Para reflexionar en su directorio:
- ¿Existe un patrón reconocible sobre quiénes hablan primero, más frecuentemente o con mayor impacto en las decisiones finales?
- ¿Cómo reacciona el grupo cuando una idea rechazada inicialmente es reformulada por una voz más “autorizada”?
- ¿En qué medida las dinámicas de atención en su directorio reflejan patrones culturales latinoamericanos de deferencia y jerarquía?
- ¿Qué voces podrían estar sistemáticamente subrepresentadas en sus discusiones más críticas?
La verdadera riqueza cognitiva de un directorio diverso solo se materializa cuando su economía de atención permite que todas las perspectivas relevantes no solo sean escuchadas, sino verdaderamente consideradas.
P.D. El presidente más efectivo no es quien mejor expresa sus propias ideas, sino quien mejor orquesta la expresión equilibrada de todas las ideas valiosas del grupo.